Cuando desapareció, todo mi tiempo era leve,
sola yo, bajo los desperdicios de sus palabras;
el silencio y la noche.
Y ahora el frío.
jueves, 30 de octubre de 2008
martes, 14 de octubre de 2008
Él solo
-Me he dejado el dinero en casa, saca tabaco.
-¡Ah! Pero si yo fui con Jesús a tomar una cerveza. Gasté todo.
-¿Y cuánto vale una cerveza? Ayer no tomamos tanto.
-5 euros.
Y ya supe dónde había estado.
-¡Ah! Pero si yo fui con Jesús a tomar una cerveza. Gasté todo.
-¿Y cuánto vale una cerveza? Ayer no tomamos tanto.
-5 euros.
Y ya supe dónde había estado.
lunes, 6 de octubre de 2008
¿Y tú?
...como esa idea mía, ¡sí esa! Esa que al principio nació de mí, pero que tenía tu mismo color de pelo... los dos sabíamos que nada tenía que ver con la genética o con un nacimiento sin llanto. Más bien estuvo relacionado con el hecho, con el espanto, con esa manía mía por el desorden, por llevar calcetines que se quieren (aunque uno sea rojo y el otro se vista de lunares), por mi odio indiscriminado hacia el hombre de Vitruvio -él nunca entendió mis bromas-, mi costumbre de dejarme el café a medias, de no tirar los botes vacíos... Esa idea creció y se hizo grande, dejó de ser tuya o mía, para hacerse así misma. Ella al igual que tú nunca soportó dormirse con el latido del reloj, nunca comprendió mi miedo a dormir sola, mi batalla con las sábanas, mi guerra contra los pies fríos. Le faltó tiempo, puede que segundos, para encajar mi capricho de soñar en fosas comunes.
La idea dejó de estar de nuestro lado, se independizó.
-¿Aún sueñas?
- ...
La idea dejó de estar de nuestro lado, se independizó.
-¿Aún sueñas?
- ...
miércoles, 1 de octubre de 2008
Ahora lo entiendo todo
Cuando me enteré de la relación que hay entre la yema de tu dedo índice y la linea táctil que une mi hombro a la cadera, entendí esa manera de ser tan consecutivos que hemos tomado como vicio.
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